Pol Espargaró se ha quedado fuera la Q2 y saldrá desde la quinta fila en la carrera del Gran Premio de Doha, algo que le obliga drásticamente a cambiar su estrategia, y para la que tendrá que resolver el problema que tiene con los neumáticos Michelín, aunque para ello primero tendrá que entender lo ocurrido en la sesión clasificatoria.
No ha sido la mejor jornada para Pol Espargaró. El piloto de Honda, que ya se había mostrado autoexigente con anterioridad hoy ha declarado sentirse frustrado por no reconocer con exactitud los problemas con los que cuenta. La verdad es que «es un poco complicado entender exactamente qué ha pasado hoy. Nuestra primera salida en la sesión clasificatoria no ha salido bien; he comenzado y podía hacer más con el segundo neumático pero he perdido algunas décimas con un error en la primera curva«, admitía Pol.

Un cambio de mentalidad y a por la carrera
Se ha hablado mucho de los neumáticos precalentados, sin embargo, Pol Espargaró afirma que en su caso este no era el problema. «No sé si el problema es nuestro, de Michelin… no hay estabilidad en los neumáticos. Si cada uno funciona de una manera no puedes tener buen set up. Hay una gran diferencia de frenada entre uno y otro. No soy capaz de diferencia los problemas». En cualquier caso, es «un punto negativo que espero que se solucione», añadía.
«Sé que mañana irá mejor y eso es lo que resulta más frustrante», confesaba. Sobre esto el de Honda tiene claro cual es su papel, aunque tenga que cambiar de estrategia. «Tenemos ritmo para estar dentro de los cinco primeros, y creo que la carrera va a ser similar a la del fin de semana anterior». Aunque en esta ocasión el fallo sea superior al del GP de Qatar, va a tratar de empezar a adelantar «y recuperar terreno como la semana pasada. Necesitamos comprender porque otros han podido dar un paso adelante y nosotros no», insistía Pol Espargaró.