Jack Miller vuelve a ganar diez carreras después en un Gran Premio donde no ha faltado de nada. Brad Binder y Jorge Martín suben al podio, Marc cruza línea de meta en cuarta posición, mientras Pecco Bagnaia se cae cuando trataba de adelantar a Fabio Quartararo.
La carrera de MotoGP prometía dar juego desde que se apagasen los semáforos. Y las predicciones se han cumplido en todos los sentidos. En primer lugar, un domingo soleado en Motegi dejaba claro que la carrera en seco no tendría nada que ver con lo visto durante todo el fin de semana. A eso, hay que sumarle, que tras la pole conseguida por Marc Márquez, las miradas iban a estar puestas en su actuación y en la evolución del brazo durante las 24 vueltas. Pero también en Miller y en la lucha por el mundial.
Ya en la salida, el de Honda se colocó segundo y fue perdiendo algunas posiciones hasta mantenerse quinto. Las primeras plazas empezaban a ocuparlas pilotos como Jorge Martín o Jack Miller. Dos que durante todo el Gran Premio se han mostrado activos y fuertes. Y así ha sido hasta el final de la carrera, cuando ambos han cruzado línea de meta dentro del podio siendo el australiano el mejor posicionado. Brad Binder es segundo y Martín, tercero.
Pero es que la cosa no quedaba ahí. De vuelta con Marc Márquez, la quinta plaza se le quedaba corta y las opciones de luchar por algo más las veía cerca. Pasó a Miguel Oliveira y se quedó a las puertas del podio en su primera carrera completa tras la vuelta a los circuitos. Por detrás del portugués se quedaron Luca Marini y Maverick Viñales.
La carrera por el título
Pues bien, a la emoción de la victoria había que sumarle la emoción por el título. Los contendientes a hacerse con el trofeo a final de temporada salían muy retrasados, y su carrera era otra: quedar por delante de mi principal rival. Esta partido empezó ganándola el actual líder, Fabio Quartararo, en la octava posición. Por detrás, estaba Pecco Bagnaia plantándole cara un Enea Bastianiani que sufrió de neumáticos. Por lo tanto, la cosa quedaba así, momentáneamente, Fabio 8, Pecco 9 y Enea, 10º. Casi nada.
Muy bonito para ser real. La presión estaba ahí, la de Pecco sobre Fabio, y sobre todo, la de Enea sobre su futuro compañero de equipo. A falta de una vuelta para el final, el piloto oficial de Ducati se fue al suelo, y le da un toque más de sal a este mundial que no quiere decidirse todavía. Quartararo continua líder y ahora son 18 puntos los que tiene de ventaja sobre el italiano. Ahí no termina el asunto.
Por si fuera poco, Aleix Espargaró ya tenía problemas incluso antes de empezar la carrera. En la vuelta de calentamiento notó algo en la moto y tuvo que salir desde el pitlane, lo que ha hecho disputar una carrera de persecución. Finalmente, ha cruzado línea de meta en decimoséptima posición.