La primera toma de contacto de Marc Márquez con Losail ha sido más que positiva tras su segunda plaza en los libres. Sin embargo, tiene la vista puesta en Suzuki y la opción de luchar por la victoria del domingo.
«En ritmo de carrera esperaba algo similar a lo que he hecho hoy, pero no esperaba ser tan rápido a una vuelta», decía Marc Márquez en rueda de prensa. El de Honda añadía que físicamente ha «mejorado mucho» y que lo que necesita es ir «modulando durante el fin de semana«.
Algo positivo porque el brazo no le ha condicionado para nada. «He pilotado sin dolor, mejor que en todo el año pasado. Todos los pilotos tenemos molestias, el dolor es otra cosa». A estas declaraciones hay que sumarles las que hablan de Honda y el gran trabajo que también han hecho desde Japón.
«La única marca que podía revolucionar la moto era Honda»
Sin embargo, estos avances, aunque son mucho más bueno, han condicionado su manera de pilotar, y ha tenido que adaptarse a ella. «Ahora no soy tan rápido en la entrada en curva. Y aunque no tengo la sensación de ser rápido, los tiempos salen y si soy agresivo voy más lento», decía Márquez. Además, admite que «la única marca que podía revolucionar la moto esa era Honda«.
Y va con cautela, no solo en su resultado para el domingo, sino en la actuación de las Ducati, de las cuales «no se fía un pelo», y prefiere esperar a después de la carrera para dar su opinión. De quien sí hablar es de las Suzuki y admite que tanto Joan Mir como Alex Rins «están para ser primero y segundo el domingo«, concluye el de Honda.